El Quijote Siglo XXI por Rafael Chehín TAK

El Quijote Siglo XXI fue creado por Rafael Chehín a partir de materiales reciclados: transformación, invención, renacimiento. La maduración creativa del artista también puede observarse en el círculo de poder que acompaña y protege al desgarbado personaje de Cervantes.

Esta muestra tuvo lugar en a Sala de Exposiciones Manuel Belgrano de la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y se llamó “Los Guardianes de Otras Dimensiones”, en donde ademas de las esculturas de Chehín hubo fotografías de Miguel Acuña.

Acompaña a la muestra un texto escrito por Martin Cativa.


La cultura de la raza humana crea productos para el consumo y para la conciencia. El artista Rafael Chehín lo comprendió desde su primera infancia, cuando en un paseo junto a su padre descubrió su vocación al contemplar el icónico Don Quijote de La Mancha.

Hoy, “El caballero de la triste figura”, ese jinete poético de mil batallas y fantásticas visiones, no es ajeno a la crisis de valores que atraviesa el mundo. ¿Por qué la naturaleza está castigando tan severamente a la civilización? ¿La codicia del hombre puso a girar con crueldad la rueda kármica? Todas esas preguntas que se formula el personaje están atrapadas en su máscara nuclear. La contaminación del planeta y la agonía de la cultura no le permiten expresar en voz alta que los cambios que necesita el mundo no son ya materia utópica de la locura, sino más bien una cuestión de la más elemental justicia. Y sin embargo, aún ante la ausencia de su leal escudero y su caballo, este silencio reflexivo nos está comunicando que todavía, salvo para la muerte, para todo hay remedio. La educación y la cultura son las piedras angulares de su fe.
Nuestro Quijote Siglo XXI fue creado por Chehín a partir de materiales reciclados: transformación, invención, renacimiento. La maduración creativa del artista también puede observarse en el círculo de poder que acompaña y protege al desgarbado personaje de Cervantes. Son 5 obras creadas a través del reciclado vaciado en bronce. Un detalle no menor que ha jerarquizado sus mejores obras: El Niño de las Estrellas, El Robot, Mickey, Pelucho El Perro Azul de Bronce, La Jirafa y su última pieza de chatarra, La Hormiga.

¿Qué pensamos cuando contemplamos cada pieza? Que la cultura puede trascender la muerte y continuar siendo vida, porque todas las formas de amor, arte y pensamiento son parte suya y parte nuestra. William Blake fue bien explícito: “La eternidad está enamorada de las creaciones del tiempo.”

Todas las esculturas serán acompañadas por el trabajo fotográfico de Miguel Acuña, en un registro de Artista a Artista en el que colisionan las luces de la alquimia, la tecnología, los portales astrales y sobretodo, los nuevos mundos que invoca la fuerza del corazón.

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