Inspirada en las fotografías de Helmut Newton y Lilian Baseman, Jason Wu trajo para su temporada SS2013 una colección que resalta su profundo conocimiento de lo femenino, mezclado con un costado sexy y atrevido.
Será porque su línea de difusión, Miss Wu, le permite mostrar un costado mas divertido e informal, que esta colección tiene una madurez y sofisticación permanente casi inalterable. El desfile lo abrió la top Carolyn Murphy, con su belleza eterna y un vestido de cuero con recortes en láser y detalles en encaje, materiales de los que se valió el diseñador para el recorrido de casi todas las prendas en esta temporada.
La progresión de looks, en una paleta que se balanceó entre los blancos, cremas, beige, negros y acentos en un coral apagado y un azul medianoche, fue un ensayo de la perfección de la línea del diseñador, que encontró en las transparencias un aliado a la hora de resaltar las siluetas, creando una visión de rayos x de la figura de las modelos e insinuando la corsetería y ropa interior a través de capas infinitas de chiffon y tul.
Los complementos, infaltables en Wu, fueron las estrellas de la noche: cinturones de cuero y arneses que le trajeron un toque de S&M a la inocencia y fluidez de los vestidos. El vestido del cierre, una nube translúcida de tul estrellado con un movimiento hipnótico interminable, nos dejó en un estado de ensueño del que todavía no nos podemos despertar, si tan solo quisiéramos.